PARA LA HISTORIA DE LOS GRUPOS SUBALTERNOS
El Rebelde y los inicios de la Independencia del Líbano
MIGUEL ANGEL HERRERA ZGAIB
miguel.herrera@transpolitica.org
La lucha por la independencia
Hace unos pocos días llegó a mi atención un libro escrito por Alexander Najjar, en francés en su original, traducido por Lucie Gumuchdjian, del Centro de Estudios Libaneses, dedicado a Michel Zaccour, 1896-1937, The Rebel, publicado en 2011.
El escrito arranca con un epígrafe de un gran ensayista y poeta, Paul Valéry. "Un gran hombre es aquella peculiar exacta relación entre ideas y ejecución. No hay duda que la vida del periodista Michel Zaccour, político, dos veces diputado, y ministro del interior, al final de sus días. Su cronista y biógrafo, Alexander logra un equilibrio efectivo entre historia nacional y vida personal, a lo largo de 141 páginas ricas en detalles e información sobre los primeros pasos de la independencia libanesa sujeta a la autoridad del Alto comisionado francés.
No hay duda, también, del perfil liberal del periodista Zaccour, así como el respeto y cautela de éste y su partido frente al poderío militar y la injerencia francesa que dominaba al Líbano. Y es particularmente vibrante, en términos parlamentarios, la retórica y denuncias que robustecen la acción concientizadora y aguerrida con la que el periodista y polemista enfrenta la suspensión de la Constitución de 1926 y el intento de reinstaurarla en 1936, después que se autorizó la elección presidencial por la Cámara de diputados, que ganó Emil Eddé, y perdieron los becharistas de Zaccour.
Cuando se reunieron el Patriarca Hoayek y el primer ministro Clemenceau, además de la constitución quedaron pendientes la firma de un tratado, y la unión del Líbano a la Liga de las Naciones concebida por Woodrow Wilson, en el marco de la primera Guerra Mundial. El 16 de abril de 1936 se anunciaba un acuerdo entre la oposición y el gobierno del Líbano para reunirse a negociar el tratado pendiente en París.
El tratado se firmó el 13 de noviembre de 1936, y significó para los musulmanes libaneses el fin de la deseado unión con Siria. El tratado duraría 25 años, con la posiible renovación por un periodo igual, por acuerdo tácito. Era el tiempo brevísimo del Frente Popular en Francia, y con su caída este tratado quedó sin ratificación, y el proceso de independencia del Líbano en veremos. Pero Zaccour, a través de su diario Al Maarad, reanudó la batalla, y fue suspendido por la autoridad libanesa, y nunca más reapareció.
Una pequeña historia
El diario Al Maarad resume la historia misma de Michel Zaccour, y también, en buena parte, la de la población libanesa sujeta primero al dominio imperial turco, y luego del fin de la I Guerra, al mandato francés. En 1925, el general Sarrail nombró a León Cayla gobernandor del Gran Líbano. Luego, en 1932, la constitución es suspendida por el alto comisionado francés Henri Ponsot, que produce como respuesta la creación del Bloque Constitucional de resistencia y rebeldía. En esta lucha se forjó el periódico que apareció en 1921 y llegó a tener 1.106 ediciones, y en el cual publicó sus poemas y ensayos Jalil GIbran, como un colaborador asiduo
La familia Zaccour, en parte emigró a América, y un hermano (tío) de Michel, Abdo (Edmond) se estableció con éxito comercial en Cali (Colombia). Allí hizo fortuna en la actividad textil, comerciando, luego se convirtió en agente de la General Motors, y se convirtió en propietario, además, del hipódromo de la ciudad. Él siempre apoyó la causa de su hermano, y por esa vida, la independencia pacífica del Líbano, hasta la muerte intempestiva de su hermano, cuando tenía el cargo de Ministro del interior, relaciones internacionales y educación, que desempeñó desde el 14 de marzo de 1937 hasta el 19 de junio cuando fallece a la madrugada de aquel día. Y fue sepultado en Chiyah, con todos los honores en un panteón familiar.
La muerte de Michel Zaccour resultó a la postre indiciaria de la suerte de la coalición entre los dos partidos principales, lo cual condujo al aplazamiento de la independencia del país. La viuda, Rose, facilitó la imprenta para imprimir otro periódico, Al-Sayad de Said Freiha comprometido con la causa de la independencia definitiva, y otra publicación "???", más combativa y a contramano de los dictados de la agencia de Seguridad General francesa. Y contribuyó, igualmente, a que se realizara la alianza entre Béchara El-Khoury y Riad el-Solh en 1943, a la vez que dio apoyo al gobierno libanés en el exilio. Rose, quien compartió apenas 6 años con Michel, vivió la trayectoria final de la independencia libanesa, y falleció en París en 1996.
Un epílogo
El escritor del libro que reseño ha hecho un trabajo notable de recopilación, y puesto en forma sencilla la vida de un hombre ejemplar, un precursor de la independencia libanesa, Michel Zaccour. La prosa y claridad en el entendimiento y comprensión de las situaciones no sorprenden, por Alexandre Najjar es un escritor e intelectual probado como se deriva de su biografía intelectual, como que es autor de siete novelas, la última de las cuales se titula Berlín 36, publicada por la prestigiosa editorial Plon (2009).
Najjar es un autor bilingüe, prendado de la civilización francesa. Como poeta ha escrito un sentido homenaje a Haití y su tragedia con el título Haiti, Aller simple pour la mort, publicado por Dergham (2010), y en el género de la biografía tiene también una Khalil Gibran, Pygmalion (2002), y Saint Jean-Baptiste, de la misma editorial, 2005. Por último, en materia de ensayo histórico tiene una publicación en dos volúmenes, De Gaulle et le Liban 2002, 2004).
El Rebelde y los inicios de la Independencia del Líbano
MIGUEL ANGEL HERRERA ZGAIB
miguel.herrera@transpolitica.org
La lucha por la independencia
Hace unos pocos días llegó a mi atención un libro escrito por Alexander Najjar, en francés en su original, traducido por Lucie Gumuchdjian, del Centro de Estudios Libaneses, dedicado a Michel Zaccour, 1896-1937, The Rebel, publicado en 2011.
El escrito arranca con un epígrafe de un gran ensayista y poeta, Paul Valéry. "Un gran hombre es aquella peculiar exacta relación entre ideas y ejecución. No hay duda que la vida del periodista Michel Zaccour, político, dos veces diputado, y ministro del interior, al final de sus días. Su cronista y biógrafo, Alexander logra un equilibrio efectivo entre historia nacional y vida personal, a lo largo de 141 páginas ricas en detalles e información sobre los primeros pasos de la independencia libanesa sujeta a la autoridad del Alto comisionado francés.
No hay duda, también, del perfil liberal del periodista Zaccour, así como el respeto y cautela de éste y su partido frente al poderío militar y la injerencia francesa que dominaba al Líbano. Y es particularmente vibrante, en términos parlamentarios, la retórica y denuncias que robustecen la acción concientizadora y aguerrida con la que el periodista y polemista enfrenta la suspensión de la Constitución de 1926 y el intento de reinstaurarla en 1936, después que se autorizó la elección presidencial por la Cámara de diputados, que ganó Emil Eddé, y perdieron los becharistas de Zaccour.
Cuando se reunieron el Patriarca Hoayek y el primer ministro Clemenceau, además de la constitución quedaron pendientes la firma de un tratado, y la unión del Líbano a la Liga de las Naciones concebida por Woodrow Wilson, en el marco de la primera Guerra Mundial. El 16 de abril de 1936 se anunciaba un acuerdo entre la oposición y el gobierno del Líbano para reunirse a negociar el tratado pendiente en París.
El tratado se firmó el 13 de noviembre de 1936, y significó para los musulmanes libaneses el fin de la deseado unión con Siria. El tratado duraría 25 años, con la posiible renovación por un periodo igual, por acuerdo tácito. Era el tiempo brevísimo del Frente Popular en Francia, y con su caída este tratado quedó sin ratificación, y el proceso de independencia del Líbano en veremos. Pero Zaccour, a través de su diario Al Maarad, reanudó la batalla, y fue suspendido por la autoridad libanesa, y nunca más reapareció.
Una pequeña historia
El diario Al Maarad resume la historia misma de Michel Zaccour, y también, en buena parte, la de la población libanesa sujeta primero al dominio imperial turco, y luego del fin de la I Guerra, al mandato francés. En 1925, el general Sarrail nombró a León Cayla gobernandor del Gran Líbano. Luego, en 1932, la constitución es suspendida por el alto comisionado francés Henri Ponsot, que produce como respuesta la creación del Bloque Constitucional de resistencia y rebeldía. En esta lucha se forjó el periódico que apareció en 1921 y llegó a tener 1.106 ediciones, y en el cual publicó sus poemas y ensayos Jalil GIbran, como un colaborador asiduo
La familia Zaccour, en parte emigró a América, y un hermano (tío) de Michel, Abdo (Edmond) se estableció con éxito comercial en Cali (Colombia). Allí hizo fortuna en la actividad textil, comerciando, luego se convirtió en agente de la General Motors, y se convirtió en propietario, además, del hipódromo de la ciudad. Él siempre apoyó la causa de su hermano, y por esa vida, la independencia pacífica del Líbano, hasta la muerte intempestiva de su hermano, cuando tenía el cargo de Ministro del interior, relaciones internacionales y educación, que desempeñó desde el 14 de marzo de 1937 hasta el 19 de junio cuando fallece a la madrugada de aquel día. Y fue sepultado en Chiyah, con todos los honores en un panteón familiar.
La muerte de Michel Zaccour resultó a la postre indiciaria de la suerte de la coalición entre los dos partidos principales, lo cual condujo al aplazamiento de la independencia del país. La viuda, Rose, facilitó la imprenta para imprimir otro periódico, Al-Sayad de Said Freiha comprometido con la causa de la independencia definitiva, y otra publicación "???", más combativa y a contramano de los dictados de la agencia de Seguridad General francesa. Y contribuyó, igualmente, a que se realizara la alianza entre Béchara El-Khoury y Riad el-Solh en 1943, a la vez que dio apoyo al gobierno libanés en el exilio. Rose, quien compartió apenas 6 años con Michel, vivió la trayectoria final de la independencia libanesa, y falleció en París en 1996.
Un epílogo
El escritor del libro que reseño ha hecho un trabajo notable de recopilación, y puesto en forma sencilla la vida de un hombre ejemplar, un precursor de la independencia libanesa, Michel Zaccour. La prosa y claridad en el entendimiento y comprensión de las situaciones no sorprenden, por Alexandre Najjar es un escritor e intelectual probado como se deriva de su biografía intelectual, como que es autor de siete novelas, la última de las cuales se titula Berlín 36, publicada por la prestigiosa editorial Plon (2009).
Najjar es un autor bilingüe, prendado de la civilización francesa. Como poeta ha escrito un sentido homenaje a Haití y su tragedia con el título Haiti, Aller simple pour la mort, publicado por Dergham (2010), y en el género de la biografía tiene también una Khalil Gibran, Pygmalion (2002), y Saint Jean-Baptiste, de la misma editorial, 2005. Por último, en materia de ensayo histórico tiene una publicación en dos volúmenes, De Gaulle et le Liban 2002, 2004).
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