¿Por qué no perdería Chávez este domingo?
Miguel Angel Herrera Z
Proyecto @utonomista
No hay duda que Henrique es un buen competidor, hasta el punto de ponerse a jugar en el terreno conquistado por Chávez, el proyecto Bolivariano de auxilio y atención a pobres y miserables, con las misiones sociales barrio adentro, donde los cubanos se han fajado para organizar y atender servicios básicos. Ofrecidos a quienes fueron desheredados por muchos años de los favores de la renta petrolera, que repartían adecos y copeyanos, mientras los otros miraban de lejos derroche y opulencia.
Ya van casi 14 años, en que la tortilla se volteó de algún modo, y lo que llaman "populismo" ha construido un proyecto, contradictorio, que no descarta dosis de corrupción y de corruptela, pero que obtiene favor y respaldo cierto de algo más de la mitad de la gente de la rica Venezuela. Si lo hecho fuera tan malo, sería mejor que nada o casi nada que los gobernantes de antes les ofrecieron. No hay punto de comparación.
Promesas y hechos
Para las promesas de Capriles, hay hechos del chavismo, desde la construcción de casas, hasta educación y salud para los más necesitados y "jodidos" de la tierra. Y se ha conseguido jugando con las armas de la llamada democracia liberal, que todo ha querido ser menos democracia.
Ahora, Venezuela, vive los tiempos de lo que Antonio García llamaba democracia social, y tiene como tarea, si Chávez vuelve a ganar como supongo que ocurrirá, avanzar hacia la democracia económica, la tarea más exigente y compleja, porque es enfrentar de lleno a la despiadada racionalidad capitalista, con un proyecto diferente, del cual hay poquísimos antecedentes en la vecindad. Habrá que ver, ahora sí, en qué consiste el socialismo del siglo XXI.
Para entonces no será suficiente el carisma, el vigoroso "resucite" de Chávez del cáncer tratado por la medicina cubana, así le haya valido un Potosí a la sociedad venezolana, que a la vez ha contribuido a que la Cuba socialista haya sobrevivido al "periodo especial" con un flujo sostenido de petrodólares, que también han tocado otras costas al servicio del sueño de la patria grande de Bolívar.
Una cosa por la otra, dirán los jugadores y tahúres, que desde el cierre de los casinos en La Habana caminan por toda América Latina, haciendo sus apuestas en el capitalismo casino que con lucidez estudió Susan Strange.
¿Y cómo será pasado mañana?
Es posible que mañana se establezca un nuevo récord en materia de participación electoral para América Latina y Suramérica. Es muy posible que vote el 80 porciento de la población apta. Lo que si no me parece probable es que Chávez gane por más de un millón quinientos mil votos.
En resumen, eso querría decir que habrá algo así como 18 millones de venezolanos movilizados este domingo, y dispuestos a defender su causa y sus intereses voto a voto.
Por último, no me disgutará que el guarismo de diferencia sea mayor, por voluntad de las multitudes que desbordan al PSUV. Tampoco que alegando una nueva victoria el Comandante pueda ignorar a la oposición, y mucho menos menospreciar a la intelectualidad universitaria y estudiantil que, en parte considerable, está ahora en la orilla crítica.
Claro, Venezuela avanzará la práctica democrática, que tendrá que actuar en función de mejorar el manejo económico nacional, para conjurar el alto riesgo de ser atacados por la "enfermedad holandesa".
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