PRAXIS SUR

A POCOS DÍAS, ¿QUÉ DECIDIRÁ ESPAÑA?

"...el presidente debe ser una persona decente, y usted no lo es." Roberto   Sánchez en el debate en la Academia de la TV, Madrid, 14/12/2015.

Jamás nadie me ha citado en un juzgado, ni jamás nadie me acusó de apropiarme de nada." Mariano Rajoy responde al señalamiento del rival del PSOE.

                                         Ayer, en un debate tradicional, a pocos días del voto, se encontraron los dos candidatos más opcionados, Mariano del desprestigiado PP, y su rival, Pedro Sánchez,  del PSOE, en picada también. Sin embargo,los dos se han repartido el "pastel" del erario por todos estos años, después de la caída del franquismo.

 Aunque hay desafíos relevantes, renovadores ninguno de los dos, Podemos y Ciudadanos, con sus líderes, Pablo Iglesias, y Albert Rivera, conforme a las encuestas parecen aptos para desbancarlos, aunque así lo proclamen, y cómo no. Pero, a pesar de los registros, Iglesias ha insistido que en las dos pasadas elecciones, los encuestadores no dieron "con el chiste".

Sabido es que las encuestas, de modo general, no son aptas para medir situaciones excepcionales, en la mayoría de los casos, porque lo que siempre miden son percepciones, y las encuestadoras, miden por lo general, a públicos regularmente consultados por ellas; y estos son poblaciones que fluctúan, por lo general, entre 800 y 1200 personas, según los casos y parámetros de confiabilidad estimados.

Podemos y Ciudadanos vs.  Bipartidismo posfranquista

                                                  Para la fecha, y hasta el 20 de diciembre, cuando votarán los ibéricos, dentro y fuera de la península, ya no habrá sorpresas que atender, porque las nuevas figuras ya son conocidas, y están ubicadas, cuasi simétricamente, a la derecha e izquierda.

Leídos los sondeos, el PP tiene el 25,3 de favorabilidad, y de mantenerse podría ganar entre 105 y 112 parlamentarios, pero nunca obtendrá la mayoría absoluta. Lo cual supone que ya se adelantan acuerdos con la agrupación Ciudadanos.  Estos jóvenes de centro derecha, y que tiene sus raíces en Cataluña,  se ha crecido, en lucha contra los logros electorales de Podemos, quien emergió como fuerza promisorio cuando eligió a 5 representantes al parlamento europeo. 

Ciudadanos, al disputarle el lugar al emergente Podemos, una renovación de la izquierda, que no insistió más en la coalición Izquierda Unida, para ganar los votos de la clase media golpeada por los ajustes y destorcida de la economía española, constituyen la verdadera novedad política con sus bemoles.

 Ambos resolverán, conforme a los resultados, la incógnita que definirá el domingo qué coalición podrá formarse, a la derecha y a la izquierda para poder gobernar a España. En particular, ahora que la economía peninsular sobreagua, como lo recordó Rajoy a Sánchez; pero, no es menos cierto que el desempleo de dos dígitos continua, la desilusión de los jóvenes se mantiene, y los ademanes de nacionalismos de los asociados en la monarquía de los Borbones no se detienen.

Las cifras de antes y los sondeos

En 2011,  el PP tenía 176 diputados, ahora ni se lo sueña, por lo que pactará con Podemos, que tendrá que resolver cómo se ubica en la conflictiva Cataluña, con las demandas de independencia que lidera el derechista Artur Mas. De otra parte, Podemos ha insistido que solo cuando ellos van a la delantera, logran que los socialistas tradicionales del PSOE, apoyen las verdaderas causas que requieren solución. 

En cualquier caso, el episodio electoral definirá, en últimas, qué tanto ha aprendido la España del común en relación con el neoliberalismo imperante, y su reencauche con la figura del joven Albert Rivera; y cuánta disposición hay para avanzar más allá de socialismo desteñido y claudicante que ha practicado el PSOE, que bajará su cuota de diputados que para 2011 era de 110, y que verá crecer la diputación de Podemos,

Bajo el liderazgo de Pablo Iglesias, a pesar que Podemos perdió, en parte, a uno de sus más caracterizados capitanes, Juan Carlos Monedero, contra quien se enfilaron, sin justificación baterías; recordándole los pagos recibidos del PSUV, por su asesoría, la tendencia de la izquierda nueva quiere verse consolidada, aunque no logra todavía, persuadir a la ortodoxa del partido Comunista que insiste en una fórmula probada como ineficaz.

Los debates y el inmediato futuro

"No han ganado ni un solo voto de los indecisos; en todo caso, han convencido a los suyos.". Bieito Rubido, Diario ABC.

                                        Por último, en materia de debates, conviene recordar que Pablo Iglesias, nieto de un socialista prominente, ganó en las dos confrontaciones en que concurrieron los otros adversarios, menos Rajoy, que no se jugó el pellejo. En la única confrontación entre los dos punteros, este lunes pasado, Sánchez y Rajoy, éste trató de borrar el señalamiento por indecente que le hizo su contrincante, tapando  indignidad y corrupciones del PP, enrostrándole a los socialistas responsabilidad por  el  desastroso desempeño económico de los socialistas conducidos por Rodríguez Zapatero.

Si atendiéramos a los indicadores del fútbol y la política, no parece ser un buen tiempo para el Real Madrid, y sus afectos seguidores del PP, quienes no son pocos, y en cambio sí, a mitad de campeonato, el retorno prometedor del Barcelona y el ascenso sostenido del Atlético de Madrid, conjuntos donde se alinean miles de aficionados socialistas y de izquierda. Con todo no aparece claro, para la tribuna, que la contienda electoral que marcha en paralelo se vaya a definir por penales contra los socios bipartidistas, PP y PSOE. 

Mis deseos, desde esta tribuna virtual, van con Podemos, quien, sin duda, ha contribuido a sacudir el bipartidismo heredero vergozante del franquismo. Abrió después de las protestas multitudinarias en la calle y plazas, la aún estrecha avenida de la democracia al otro lado de los Pirineos, por lo que debería obtener un tercer lugar. 

Aunque en la vecina Francia languidece el socialismo a L´Hollande, dándole impulso a la reacción con Marie Le Pen, no parece que Podemos, en España pueda desbancar al PSOE del segundo puesto, pero sí disponer de una buena bancada que de ser mayoría podrá forzar al PSOE a tomar distancia de su socio circunstancial, el PP, con quien tantas trapisondas le han jugado al país nacional español que las sufre y padece como el que más.