SOCIALISMO
vs POPULISMO – Capítulo III
Con la presente entrega continuamos el ejercicio propuesto y desarrollado en lo fundamental por el colega y amigo economista Luis Mejía, radicado en New York. Estamos a la espera de los comentarios, observaciones y sugerencias, en esta coyuntura denominada por algunos estudiosos "posprogresismo latinoamericano". N de la R.
ACUMULACIÓN Y DISTRIBUCIÓN DE LA RIQUEZA SOCIAL
LUIS
MEJÍA, Ph.D. en Economía
Índice:
1. ¿Cuál es la riqueza de un país?
2. Maneras de distribuir la riqueza social
3. Criterios para distribuir la riqueza social
4. Acumulación de riqueza
5. Efectos de la acumulación
6. Distribución y sistemas económicos
7. La distribución de la riqueza en las sociedades
escandinavas
Este
es el tercer capítulo de la colaboración que estamos desarrollando el Profesor
Miguel Herrera Zgaib, Universidad Nacional de Colombia – Bogotá, y yo sobre el
tópico Socialismo y Populismo.
En
este capítulo hablaremos de la riqueza social, su distribución y su acumulación
en pocas manos. Insistiremos en el efecto que la acumulación tiene en la sociedad.
Presentaremos algunos ejemplos de acumulación a nivel mundial y a nivel
nacional.
Conviene
advertir al lector que este es un trabajo en desarrollo. Ahora, como antes,
invitamos a nuestros lectores a participar con sus sugerencias, críticas y
adiciones.
1. ¿Cuál es la riqueza de un país?
La riqueza de un país está formada por su capital
humano, sus recursos naturales y las mercancías y servicios que sus miembros
producen y valoran porque los necesitan, los usan o los desean para satisfacer
sus necesidades reales o imaginadas.
Desde el punto de vista económico la riqueza social es
un subconjunto del patrimonio cultural, demográfico, emocional e histórico de
un pueblo. Separamos lo económico para facilitar su estudio.
Un inventario parcial de la riqueza económica de una
sociedad incluiría:
a) El capital
humano, es decir los conocimientos, experiencia, habilidades e ingenio creativo
de la población;
b) El trabajo, que comprende el esfuerzo físico e
intelectual de la gente para transformar la naturaleza y crear bienes y
servicios;
c) El producto del trabajo, es decir los bienes y
servicios resultantes del esfuerzo transformador del ser humano;
d) El patrimonio del estado representado en: [1] los impuestos de los
contribuyentes, [2] los pagos que recibe por servicios públicos, [3] los bienes
de dominio público (ej., baldíos, subsuelo, obras de infraestructura, edificios
oficiales), [4] las rentas y regalías que recibe por permitir la explotación de
bienes de dominio público, [5] el patrimonio de las empresas públicas, [6] las
multas que pagan los infractores de sus reglamentos, [7] el flujo de caja generado
por la deuda pública;
e) El patrimonio en manos de los ciudadanos individuales y de las
sociedades comerciales que estos crean;
f) Los beneficios económicos que reciben los particulares a consecuencia
de decisiones que toma el estado o como un efecto del progreso social. A manera
de ejemplo citemos:
[1] Las ganancias especiales que
resultan de monopolios autorizados, de restricciones en el comercio de divisas,
de restricciones a la importación de mercancías, de cambios en la destinación
de la tierra[i], [2] las ganancias de quienes practican profesiones u oficios sujetos a
licencia oficial[ii], [3] la valorización de propiedades privadas –productivas e
improductivas- causada por inversiones estatales o por el crecimiento de la
población y de la economía[iii];
g) Los fondos de ayuda internacional.
Podríamos hacer otras clasificaciones de la riqueza social. Por ejemplo,
una basada en los recursos naturales renovables y no renovables, que incluiría
la tierra cultivable y urbanizable, las minas, los bosques, las aguas, las
tierras que por cualquier razón no son económicamente utilizables, el paisaje.
Pero la que hemos propuesto nos facilita la discusión del problema de la
distribución que es de lo que queremos hablar en este capítulo.
2. Maneras de distribuir la riqueza social
Una
vez creada la riqueza con el trabajo de toda la sociedad, ¿a quién le pertenece?
La
humanidad ha respondido a esta pregunta creando costumbres y leyes según las
cuales:
a)
A uno le pertenece todo lo que produce individualemente y una porción de lo que
produce en compañía,
b)
lo que uno produce debe compartirlo con parientes o vecinos,
c)
lo que uno produce pertenece en todo o en parte a un extraño que nada contribuyó
al esfuerzo productivo.
Estas
leyes y costumbres coexisten, se mezclan, se abandonan, se cambian, se adaptan
a los intereses de la clase dominante. Con excepción, claro, de las sociedades
recolectoras y cazadoras, que no tienen clase dominante, y las sociedades
patriarcales, que tienen individuos dominantes pero no una clase propiamente
dicha.
[Ver
ejemplos en el Apéndice a este capítulo].
3. Criterios para distribuir la riqueza social
Las
sociedades también inventan criterios para justificar las leyes y costumbres
distributivas. Distintos momentos y lugares de la historia muestran propuestas
y prácticas según las cuales la riqueza social se reparte:
a)
A cada quien según sus necesidades,
b)
A cada quien según sus méritos,
c)
A cada quien según la contribución que haga al proceso productivo,
d)
cada quien según su poder o su influencia,
e)
A cada quien según la propiedad que ya tenga,
f)
A cada quien según sus conexiones con los poderosos,
g)
A cada quien según su capacidad de engañar y birlar a los demás,
h)
A cada quien según su capacidad de ejercer violencia contra los demás.
Estos
criterios tienen inspiración en principios éticos como la solidaridad humana,
la equidad social, el predominio del más fuerte, el respeto del orden existente
para impedir el caos injusto de los cambios abruptos.
Algunos
son visibles en sociedades contemporáneas bien organizadas, otros lo son en
sociedades fallidas.
Algunas
veces los miembros de la sociedad saben que estos son los criterios que los
gobiernan, otras no.
[Ver
ejemplos en el Apéndice a este capítulo].
4. Acumulación de riqueza
En
muchas sociedades, quiéralo o no la mayoría de la población, la riqueza
producida por todos fluye hacia un número relativamente pequeño de individuos o
familias en cuyas manos se acumula.
Por
ejemplo, en el año 2017 el mundo tenía 7.6 mil millones de habitantes; de
ellos, solo 2.043 tenían patrimonios de mil millones de dólares o más y 42 eran
dueños de una riqueza igual a la repartida entre la mitad de la población
mundial.
Se
calcula que la riqueza nueva creada entre marzo del 2016 y marzo del 2017 fue
US$762 mil millones; el 80% fue a parar en manos de un 1.0% de la población. En
la última década el ingreso de un trabajador regular ha aumentado en un 2.0% por
año en promedio mientras que la riqueza de los multimillonarios ha aumentado
13% por año[iv].
Esta
situación se repite, por ejemplo, en Alemania donde los 45 hogares más ricos
son dueños de una riqueza igual a la que tiene la mitad de la población más
pobre[v].
Esta
acumulación es distinta de la acumulación de capital necesaria para el
desarrollo industrial, la construcción de infraestructura y el aprovechamiento
de economías de escala, de lo cual hablaremos en otro capítulo.
A
nivel internacional la acumulación de riqueza en unas pocas naciones es similar
a la acumulación en unas pocas familias dentro de un país. Esta situación
resulta [1] de las diferencias en la velocidad y dirección del desarrollo de
los países, [2] de desequilibrios y disparidades en las relaciones comerciales
y políticas entre estados, territorios y naciones y [3] de las oportunidades
internacionales que se consolidan alrededor de los ciudadanos más ricos de un
país.
5. Efectos de la acumulación
Estudiosos
serios de la economía (Celso Furtado[vi] y Thomas Piketty[vii], por ejemplo) ponen de presente que la acumulación de
riqueza en pocas manos es perjudicial para la sociedad porque, entre otras
razones, por las siguientes:
[1]
distorsiona la distribución de recursos entre los distintos sectores de la
economía, [2] concentra el poder en la clase alta con perjuicio de las clases
subalternas, [3] limita el progreso económico porque las clases bajas no tienen
suficiente poder de compra para mantener viva la demanda de bienes y servicios,
y [4] genera inestabilidad social.
Los
propagandistas del capitalismo -que no tienen obligación de ser economistas
serios- sostienen que la acumulación es beneficiosa para la sociedad porque [1]
premia el talento y el esfuerzo de los más capaces, [2] estimula la inversión y
las ideas innovadoras, [3] remunera los riesgos de pérdida que corre el
inversionista[viii],
y [4] le permite a la clase alta hacer gastos que irrigan la economía y gotean
hacia las clases bajas haciéndolas más prósperas[ix].
El
informe
de Oxfam sobre acumulación mundial de la riqueza en el 2017 calcula que dos
terceras partes de la riqueza multimillonaria es producto de herencias,
monopolios y favoritismo por parte del estado, no del esfuerzo o el talento. La
tesis del goteo de la riqueza, por su parte, no ha dejado de ser una fantasía
para adornar discursos populistas de derecha[x].
Lo
evidente es que la riqueza acumulada en pocas manos genera fuerzas sociales y
políticas que presionan en dos direcciones: [1] aumentar la acumulación, y [2]
contrarrestarla o reducirla.
El
populismo acumulativo y los gobiernos de derecha van en la primera dirección: a
hacer más ricos a los ya ricos.
El
socialismo va en la segunda dirección: a reducir o moderar la acumulación para mejorar
el nivel de vida de todos.
Las
revoluciones y el populismo distributivo intentan repartir la riqueza existente,
lo logran a corto plazo y a la larga terminan entregando una buena porción a un
nuevo grupo de propietarios y creando una nueva clase dominante.
La
distribución es diferente de la transferencia de riqueza que ocurre cuando una
fortuna cambia de manos sin afectar la tasa de concentración social de la
misma.
Ello
es lo que sucede, por ejemplo, con las herencias, los desfalcos o fraudes que
victimizan a inversionistas muy ricos, los impuestos que paga la clase alta y
regresan a ella a través de contratos y subsidios del estado.
6. Distribución y sistemas económicos
La
humanidad ha experimentado con una variedad de sistemas económicos: trabajo
colectivo espontáneo en aldeas y asentamientos de colonización agrícola,
esclavismo, feudalismo, capitalismo, cooperativismo, capitalismo estatal,
socialismo. Todos son propuestas de cómo distribuir la riqueza creada por los
miembros de una sociedad.
Esos
sistemas económicos tienen varias características en común:
1)
Son creaciones
culturales, es decir, son inventados, implementados y tolerados por la gente, o
se le imponen a esta por la fuerza;
2)
Cambian con el
tiempo, unas veces gradualmente, otras de manera súbita, como consecuencia de
una calamidad colectiva (ej., terremotos o inundaciones catastróficas o un
cambio severo del clima), de las políticas de un gobierno, de las operaciones
de los conglomerados empresariales, de la presión popular organizada, de la
destrucción del statu quo por una revolución o una guerra;
3)
Mientras subsisten
están protegidos por el ordenamiento legal vigente;
4)
Algunas personas
llegan a creer que son ordenados por la divinidad, que tienen validez universal
y que generan derechos irrevocables, como si no dependieran de nuestra acción y
querer.
7. La distribución de la riqueza en las sociedades
escandinavas
En
los países escandinavos se distribuye una buena porción de la riqueza nacional
entre las clases subalternas; la clase dirigente retiene una porción menor que
en el resto del mundo.
En
esos países se combinan las siguientes instituciones para distribuir la riqueza:
a)
Una inversión social suficiente para eliminar la pobreza extrema,
b)
Libertad de mercados,
c)
Protección a la iniciativa privada,
d)
Intervención intensa del estado en la economía para coordinar la iniciativa
privada con el bienestar social,
e)
Protección de la propiedad privada de pobres y ricos,
f)
Altos impuestos pagados en proporción a los ingresos de cada cual y
g)
Un consenso dentro de la clase dirigente para ejercer el gobierno siguiendo
principios democráticos y para zanjar disputas sobre política económica y
social por vía electoral.
Podemos
decir que esos países viven una aproximación práctica al modelo socialista de
producción y distribución. Es el proyecto de sociedad que la clase dirigente y
las masas quieren realizar. Al menos por el momento.
[i] La mayoría de los países tienen regulaciones
sobre la destinación de la tierra: agrícola, industrial, comercial, vivienda.
El cambio de esa destinación puede generar ganancias superiores a las de su uso
original. Un ejemplo de estas ganancias fue documentado en Colombia: http://www.semana.com/opinion/articulo/sobrados-lote/102175-3
[ii][ii] Las licencias oficiales para el ejercicio de
profesiones u oficios (ej., médicos, abogados, ingenieros, electricistas,
choferes de autobús) o para el funcionamiento de empresas (ej., bancos,
corredores de bolsa, preparación comercial de alimentos} tienen dos efectos: ¡)
proveen un grado -más o menos flexible- de protección al consumidor y 2)
limitan la libertad de competencia y protegen las ganancias de quienes reciben
esas licencias.
[iii] Las obras de infraestructura tienden a
valorizar las tierras aledañas. En Colombia se usa la expresión “lotes de
engorde” para referirse a predios urbanos o rurales que el dueño mantiene
improductivos mientras espera que su precio suba con el tiempo y la prosperidad
colectiva. Es obvio que esa apreciación del predio nada debe a la industria y
diligencia de su propietario.
[iv] Información tomada del último reporte de Oxfam sobre acumulación mundial
de la riqueza: https://www.oxfamamerica.org/static/media/files/Reward_Work_Not_Wealth_Full_Report_-_English_-_Embargo_22_January_2018.pdf
[vi] Celso Furtado y Alfredo de Sousa, Los perfiles de la demanda y de la inversión, El
Trimestre Económico, Vol. 37, No. 147(3) (Julio-Septiembre de 1970), pp.
463-487
[x] The Cato Institute works hard to provide a rationale for the benevolent
accumulation of wealth in fewer hands: https://www.cato.org/publications/policy-analysis/five-myths-about-economic-inequality-america?gclid=EAIaIQobChMIw8nZxI_z2AIVi4nICh37LgYEEAMYASAAEgKgD_D_BwE
Luis Mejía
28 de enero de 2018
Publicado en blogluismejia.blogspot.com
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