PRIMERA ENTREGA
A LAS PUERTAS DE LA PRIMERA VUELTA
Miguel Angel Herrera Zgaib[1]
miguel.herrera@transpolitica.org
¿Un round definitivo?
La memoria abre expedientes. Walter Benjamin
Si partimos de las estadísticas electorales no hay lugar para mayores sorpresas, los ganadores en la primera vuelta del próximo 30 de mayo serán Antanas y Juan Manuel. Sin embargo, los perdedores serán, según inclinen sus preferencias, y el grado de independencia de sus electores, los que definirán quién ganará la presidencia de Colombia en la segunda vuelta.
En lo sustancial, cualquiera sea el triunfador no muestra distancia alguna de la lógica capitalista imperante aquí y allá. Uno, es el heredero del uribismo que nos anuncia la prosperidad democrática, mientras que el otro, el candidato verde de la opción centro, insiste en la bandera de la legalidad democrática.
Esto quiere decir que la prosperidad será posible sólo si las reglas del juego son respetadas. Así las cosas, la promesa de expandir el país de propietarios será fortificada si la constitución y las leyes de Colombia no son más el rey de burlas que cínicamente han sido, lo cual no impidió que unos pocos se enriquecieran a costillas de los muchos.
¿El fin justifica los medios?
Nuestro escudo dice: ´Libertad y orden. Soy más orden que libertad, porque sin orden no hay libertad. Antanas Mockus, en: El reportaje de Yamid. El Tiempo, 23 de mayo 2010, p: 1-6.
Ninguno de los dos posibles ganadores echa por la borda la seguridad democrática ni la confianza inversionista, pilares del triunfo de Álvaro Uribe. Sólo que este aserto está desmentido por los medios que utilizó para construirlos.
De una parte, la Corte probó el clientelismo del ejecutivo que compró los votos decisivos de la reelección. Ahí está el escándalo de la yidispolítica, es decir, el voto favorable de Yidis Medina para la reelección y la ausencia del congresista Teodolindo Avendaño. Ambos afiliados al partido Conservador socio del presidente Uribe y su gobierno. A cambio recibieron notarías y otras canonjías, auxilios disfrazados y puestos.[2] La Corte Suprema de Justicia ya condenó a Yidis por cohecho, pero sigue vacía la silla en espera de qué autoridad es la que completará la relación delictiva.[3]
De otra parte, sobre el uribismo y su presidente pesa la “espada de Damocles” de la para-política cuyo efecto corruptor se extendió hasta las elecciones del pasado 14 de marzo. El dos veces presidente elegido en primera vuelta lo fue con votos manchados de sangre y coacción. Él mismo no renunció a esos votos para que el congreso aprobara iniciativas con origen en el ejecutivo.
La fundación Nuevo Arcoiris denomina a la manifestación electoral de la para-política “votaciones atípicas”. Y los cabecillas para-militares Salvatore Mancuso, aún vivo y extraditado, y Vicente Castaño, desaparecido, corroboraron tal prueba, al decir en el Congreso, que las Auc contaba con la simpatía de algo más del 30 porciento de los entonces elegidos, quienes en mayoría autorizaron su comparecencia pública.
Peor aún, la misma proporción de congresistas, bajo otros nombres y partidos,[4] es la que a la fecha mantiene incólumne la para-política. Tampoco desapareció el tráfico de votos por otros medios, compra directa de votos, asistencialismo oficial y clientelismo tradicional. Ahí están las denuncian de la misión de Observación Electoral, MOE, la misión de la OEA, y del mismo Consejo Nacional Electoral, quien aún no confirma la totalidad de los elegidos hace dos meses.
Una contabilidad más precisa de los presentes y pasados resultados fraudulentos la documentó la fundación que animan León Valencia, columnista de El Tiempo, y Claudia Lopez, quien salió de allí. Además, a una semana de la primera vuelta, El Tiempo ya favoreció a un miembro de la casa Santos. Los congresistas beneficiados directa o indirectamente por/de la parapolítica, son la cara oscura del régimen para-presidencial actual, prueba de la degeneración democrática. Sus nombres se publicaron después de la elección del 14 de marzo. Con la sola excepción del PDA, la lista abarca a los cinco restantes partidos más opcionados de ganar en la contienda del 30 de mayo.
Ninguno de estos “partidos” renunció a los congresistas electos con votos non sanctos. El Liberalismo de Rafael Pardo se escuda en la esposa de Juan Manuel López Cabrales, que ni siquiera tiene, dicen, una sindicación en contra, para no soltar los votos obtenidos en la martirizada Córdoba.
El partido Verde y su líder Antanas Mockus tuvo el cobijo de Opción Centro, y obtuvo la elección al senado de su presidente, el exgobernador de Boyacá ahora destituido por la Procuraduría. Un asociado verde tardío, Sergio Fajardo, al respecto se maduró “biche”, pues nada dijo de este episodio hasta ahora; más aún, es la fórmula vicepresidencial más exitosa .
Por quién votar
La clave para los candidatos en los debates de televisión que quedan, no será tanto acertar, sino no equivocarse. Mauricio Vargas, en: La suerte está echada, El Tiempo, mayo 23 de 2010, p: 1-4
Las cuentas están claras y el chocolate espeso para los posibles 16 millones de electores. En las últimas dos encuestas Juan Manuel aventaja a Antanas en la primera vuelta, mientras que éste hace la propio en la segunda. Pero los márgenes de error consagran la incertidumbre en cuanto al posible ganador: un rango de 3 puntos atrás o delante de cualquiera de los rivales. A lo cual se suma el contingente de los indecisos que se mantiene “vivito y coleando”.
No hay duda que con esos márgenes de votación en los punteros, los demás conservadores, liberales, cambio radical y polo, partidos con más de cinco años de existencia, al sumar el 20 porciento de la intención del voto son definitivos junto a la inclinación final de los primi-votantes. Este último grupo estudiosos como Ronald Ingelhart lo ubican en la cultura posmaterialista. Unos y otros son la masa crítica de 6 millones de votantes, a la que se agregará en la segunda vuelta el millón de votos que controlan el PIN y el Mira.
Sin embargo, los partidistas tradicionales no tienen suficiente control sobre sus votantes. Este es mayor dependiendo del tiempo de existencia partidista. Así las cosas, lo que digan los jerarcas liberales y conservadores no evitará la migración espontánea de su militancia. Ellos se decidirán en la primera vuelta por el voto útil, y en la segunda por el voto inteligente, esto es, conforme a lo que perciben como la defensa de sus intereses y creencias.
A propósito del voto útil se trata es de obtener cuando menos el 4 porciento de los votos depositados en la primera vuelta. Porque de no lograrlo cada partido deberá reintegrar el anticipo ya recibido. Es una deuda que pesará para su pago, en la cabeza de sus militantes, y de los congresistas electos por ellos, amarrados unos por la ley de bancadas, y otros por la fidelidad a sus filiaciones respectivas.
Por último está la categoría del voto eficaz, que no está subordinado a ganar o perder la elección presidencial exclusivamente, sino a lograr un reconocimiento efectivo después que sepamos quién sea el elegido. Aquí se pondrá en práctica la dinámica de los jugadores con veto, que los definen, en primera instancia, las normas constitucionales. Tal es el caso de las ramas del poder público, pero también lo es la ciudadanía cuando obra en función constituyente, o mediada por la representación congresional. Y ya veremos cómo este voto eficaz puede hacerse valer en el presente ciclo electoral.[5]
[1] Profesor Asociado, Universidad Nacional de Colombia. Director del Grupo Presidencialismo y Participación. Catedrático de la maestría de Estudios Políticos, U.Javeriana, Bogotá.
[2] El exministro del interior, Sabas Pretelt de la Vega fue llamado a rendir declaración por la Fiscalía General de la Nación.
[3] No es posible olvidar, que en últimas, el otorgamiento de las notarías depende directamente del Ejecutivo, como la dirección del DAS, y las F.A. y de Policía, según lo dispuso la Constitución vigente.
[4] El PIN es el caso más notorio, que obtuvo algo más de un millón de votos, superando en resultados, por ejemplo, al PDA. Una agrupación que tendrá peso específico en la elección presidencial del 30 de mayo, y el 20 de junio de 2010, y que pretendió sin éxito tener un candidato propio para exhibir en público.
[5] Consultar Tsebelis, George. Jugadores con Veto. FCE, México, 2006.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario