jueves, 17 de abril de 2014

En Corto.
Proyecto  Fútbol, ideología y política

LA DESPEDIDA DEL BARÇA, Y LA FUGAZ ESTRELLA DEL REAL

"En fútbol, si ganas, vales..." Danny Alves, Barça.


                                                Hace algo así como un año y "pucho" yo comentaba que este club de los 16 triunfos se le notaba en decadencia, y que empezaba a jugarse sus restos. La primera indicación la dio la marcha de Guardiola.

En verdad, la cosa ha seguido empeorando, no hubo hasta ahora la renovación requerida. Por lo visto, no fue suficiente la incorporación de Neymar, y el billetal que por dentro y por fuera se hizo correr "encochinó" a la Cataluña en rebeldía contra el centralismo español.

El derroche de dinero en los altares del capital, en medio de una sociedad deprimida e indignada, tiene ahora en problemas al BARÇA, y a más de uno de sus últimos dirigentes. 

Primero fue el despelote con la investigación fiscal contra Messi, y luego la que tiene que ver con la transferencia y premios para el niño Neymar, que está en pleno curso de indagación y fallo judicial, en una tierra donde la guerra civil aun reclama una cura definitiva que recupere la memoria. 

200 millones de euros encontrados

"El golpe es muy duro, pero no siento que mi futuro tenga un cambio." Martino, DT del Barça.

                                                  El Real Madrid ayer le ganó la copa a su "archi" por un gol de antología, a los 84 minutos dijeron los cronómetros en una jugada reivindicatoria de Gareth Bale, convertido en el delantero invisible, quien en una carrera de media cancha, con un sprint por fuera de ella le hizo la jugada a Bartra, quien había hecho el único gol del Barça. El joven galés de los 100 millones la durmió en la malla.

Las dos estrellas cambiaron el rumbo final del partido. Neymar tuvo la ocasión para empatar, cuando Messi estaba prácticamente borrado de la cancha. Al descubrir, como lo dijo un comentarista, que falta el número 9 en la cancha. Es el "agujero negro" por donde se escaparon todas las ilusiones de un regreso honroso.

Tampoco estuvo Cristiano Ronaldo en la cancha, pero sí vestido impecable para saludar al acongojado Lionel al final del partido. Sobre la humanidad de los dos se han descargado, como sobre Falcao las suciedades del llamado juego fuerte, y para nada el "jogo bonito" que hace las delicias del público, que no se puede confundir con las plateas llenas, al borde del paroxismo, del circo romano.

Una caída ejemplar

El 2-2  se estrelló contra un palo, y Neymar perdió la oportunidad de construir una nueva leyenda, cuando Messi ya acusa fatiga y golpes, como los que sacaron por un tiempo a Ronaldo de la divisa merengue.

La copa del Rey rima bien con la del Real, pero se le pudo alargar la fiesta. Ayer el asunto era de carrera, de fútbol de ataquem con mucho pulmón como el que exhibieron el argentino Di María y Gareth Bale, por sobre todo dos atletas del balompié.

Este juego, el que corona al Real Madrid, en tiempo de escisiones, es uno que responde y es exprimido por los imperativos del capital global. Es uno en que el director del Nacional de Colombia empieza a destacar, porque gana partidos. A la postre, como lo recuerda Danny, el brasileño, "si ganas, vales, y si no, eres una mierda".  Y la mierda tiene en el mejor de los casos implicaciones escatológicas cuando estamos en plena celebración de la semana mayor.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario