domingo, 28 de febrero de 2016

EL ABRAZO DE LA SERPIENTE, CINE CLUB, Y 

COLOMBIA SIN FRONTERAS.

MIGUEL ANGEL HERRERA ZGAIB
Proyecto Cine Excepción,

Efemérides fílmica

Mañana, en la mañana estaremos intentando relanzar el proyecto Cinexcepción con el poderoso concurso de los jóvenes de primera matrícula de Ciencia Política, coordinados por Paula Buitrago, y el apoyo del Cineclub Sin Fronteras, que con contratiempos sumará diez años este mes de diciembre.

Entonces se conmemorará la publicación del Cuaderno 1, que fue parte del Proyecto Interactivo de Extensión del mismo nombre, y que en aquella primera etapa, estaba orientado por el semillero de investigación Gobernanza, y apareció con una ilustración del Guernika de Picasso (1937) en la portada.

En aquel primer número probaron suerte, Luis Fernando Vélez, Juanita Cuéllar, Alex Niño, Germán Cáceres, Juan Carlos García, quien escribiera sobre Foucault y la política como continuación de la guerra, y yo con una traducción del escrito de Niall Ferguson, el historiador neocon, autor de la La nación que tocó tierra.

Domingo 28, y después

Muchas películas, y novedades en el cine nacional, e internacional han acontecido durante un decenio intenso. Pero lo más relevante, esta vez, en materia de cine, es la primera nominación de la película de Ciro Guerra, "El abrazo de la serpiente".

El egresado de la Escuela de cine y tv., de la U. Nacional compite por el Oscar, en la sesión de película extranjera, frente a otras cuatro de reconocidos merecimientos. No hay expectativa cierta de que ésta sea la ganadora, pero es indiscutible la calidad de este cine de autor, del que Guerra y su esposa, Cristina Gallego, que es productora de sus películas.

Con esta película, la industria cinematográfica nacional entra en las grandes ligas, en la que ya están posicionados México, Argentina, y antes Brasil, que tienen óscares obtenidos en diferentes momentos.

Por supuesto, ya hubo nominaciones en otros escenarios del cine internacional, para Colombia. Particularmente, en Europa, en Cannes en la Berlinale, pero Hollywood, en las faldas de la montaña que rodea la ciudad de Los Angeles, sigue siendo la Meca.

Precisiones de tiempo y lugar

"Es una oportunidad para el desarrollo del Guainía" Andrés Gamboa, habitante, ET, 27/02/16, p. 12

La película, cuya historia real ocurrió en la Amazonia colombiana fue filmada, sin embargo, en Guainía, teniendo como referencia geográfica al bello río Inírida y a los cerros de Mavicure, que exhiben hermosas pinturas rupestres que aún se conservan, a pesar del descuido oficial de estos tesoros culturales precolombinos.

Luego, es una película que no tiene el carácter de un documental, si los elementos de ficción y las transposiciones que una filmación exigen casi siempre. En ese territorio habitan los Kurripaco, Cubeo, y otras etnias casi extintas y abandonadas.

Hoy, en pocos minutos, estaremos conociendo el resultado de la elección que hacen algo más de 600 jurados, la mayoría de los cuales tienen edades superiores a los 60 años, donde las mujeres son una infinita minoría, y donde los afro-americanos también. Más aún, probablemente, otro tanto nunca han visitado Colombia, no saben pronunciar su nombre, y mucho menos sabían que Guainía existiera.

La Otra Película

"En las comunidades sólo se habla de eso, de la película." Alcides Muñoz, residente en Inírida, ET, 27/02/16.

En este caso, en la fiesta del celuloide, en Hollywood, millones son también los colombianos que no conocemos , ni hemos visitado el lugar que es el escenario natural de este saga que habla del colonialismo y su mirada a territorios desconocidos en busca de un preciado regalo de la naturaleza.

Sin embargo, después del estreno de "El abrazo de la serpiente" el año pasado, cuando no se alcanzaron los 200.000 espectadores, y ahora, donde seguramente se han sumado otros miles, más los 200 y más estudiantes, que la vieron el jueves pasado, en un telón improvisado, colgado de la entrada a la cafetería de Sociología, en la U. Nacional, sentados en el pasto, y el cemento. 

Ellos estarán atentos a conocer el desenlace de esta industria del cine, en la que la realidad histórica del país se ve con otros ojos, y ya pocos recordarán el triste episodio de la plaza Ché, que nos recuerda otra historia, menos contada, y más inmediata.

Unos dos meses atrás, o algo más, una cadena de superficies comerciales, Éxito, divulgó otra película, en la que Colombia, era equiparada con Magia Salvaje, y cerraba con una referencia a los habitantes de esa naturaleza imponente, y cautivadora, triturada cada vez más por el abrazo de otra serpiente, la boa constrictor capitalista, una civilización salvaje.

La de Ciro Guerra, con rigor profesional, cuenta otra historia, e interlocuta, queriéndolo o no, con el otro, con la pluralidad de Colombia, y con su historia olvidada o ignorada. Y después de haber presentado su película, en función cerrada, en Inírida, en el local del Sena, ya no podrá impedir que los habitantes del Guainía hagan escuchar sus voces.

Y contar la otra película, la de la marginación, y las asechanzas de los grandes mega-proyectos, que pronto estarán invadiendo estas extensiones que los guardan a ellos, y a la naturaleza que contemplamos en el cine internacional.

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