PRECURSORES DEL PENSAMIENTO DE RUPTURA.
Recordando a Spinoza en interlocución de Antonio
Negri, en La Anomalía Salvaje. Edit. Anthropos, 1993.
Del Prefacio
Spinoza es la anomalía. Funda el materialismo moderno, una filosofía del ser inmanente y dado, y del ateísmo como negación de todo orden previo al obrar humano y a la constitución del ser.
El materialismo spinoziano no supera los límites de una concepción puramente <>, físico-galileana del mundo.
Tal concepción fuerza a destruir sus limites, pero queda irresuelto el problema de la relación entre la dimensión espacial y temporal.
La imaginación constituye el ser en un orden alusivamente temporal (p. 14)
El ser, antes invención dialéctica evita el "borrón" del materialismo dialéctico. La lectura de Spinoza, hecha por socialistas y marxistas, no enriquece el materialismo dialéctico, sino sólo empobrece el materialismo dialéctico para superar la dimensión espacial y objetiva del materialismo (p. 14).
Sobre la democracia
Spinoza funda la forma no mistificada de la democracia, confronta toda mistificación jurídica del Estado.
Es la fundación materialista del constitucionalismo democrático dentro del problema de la producción: la relación constitución-producción.
En la especificidad spinozista de lo político, la democracia es política de la multitud organizada en la producción, la religión de los ignorantes.
Spinoza no logra madurar la función antagónica de la lucha de clases como fundación de la realidad, pero sí plantea en el protagonismo de las masas el fundamento de la acción transformadora, social y política (p. 15).
Spinoza formula el problema de la multitud que se hace Estado, los ignorantes que se hacen religión. Constitución y producción...bajo la forma de la igualdad radical impuesta por el ateísmo (15).
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