sábado, 7 de abril de 2018

RECORDANDO EN PRESENTE
La diferencia: Gustavo Bolívar, Jóvenes y Pueblo excluido.

miguel angel herrera zgaib
Proyecto Observatorio Posconflicto y elecciones 2018

"Yo esperaba máximo 30.000 votos. Estaba sorprendido". Gustavo Bolívar.

En este juego de foto finish, Petro, quien en su juventud ejerció con riesgo la doble militancia, como clandestino, y concejal por Comuneros en Zipaquirá, tiene a la cabeza del senado a Gustavo Bolívar, otra persona de origen popular, girardoteño, denunciante del disparo contra Petro en Cúcuta.

Antes él había defendido en solitario la causa del exministro Enrique Parejo González, a quien apoyó en la causa al senado, y probó el fraude que le quitó la senaduría. Escribió un libro que lo prueba, “Cómo se roban las elecciones,” de circulación casi secreta.

Ahora Bolívar recuerda que la primera oferta de participar en estas elecciones, siendo activista del voto en blanco con la fundación “Manos limpias,” la recibió de Antanas, y luego de Gustavo.

Aceptó irse con la campaña de Petro, con valentía, a luchar contra el miedo que inspira el apóstol de la “seguridad democrática”. Simplemente, reitera como senador que buscarán la condena de Álvaro Uribe, por la responsabilidad de sus crímenes.

En la entrevista con Blu, Bolívar recuerda a la audiencia: Me dí cuenta en Quibdo, que nos habían cambiado la camioneta blindada en que íbamos con Gustavo. Entonces le dije a Petro que no podíamos subir a ese vehículo, porque tenía los vidrios demasiado claros. Nuestro conductor dijo que la otra camioneta se había dañado, pero, comprobamos que no, porque al no aceptar viajar trajeron la otra camioneta.

Con este antecedente, y lo que pasó en Cúcuta, reitera Bolívar, vamos a pagar un peritaje privado sobre los dos disparos producidos en el vidrio de la ventana de Petro. Yo no creo en el peritaje de la Fiscalía, pero si el nuevo señala que no fueron disparos los que produjeron los impactos, lo aceptaremos.

En el pasado, dice, Héctor Abad Gómez lo llamó hampón literario. Gustavo le exigió una rectificación, y éste la tuvo que hacer en su columna de la revista Semana. Y añade: yo soy escritor de la realidad, y ratifica, no he inducido a ninguno a convertirse en criminal.

Cuando Pablo Escobar ejercía la mayor violencia, lo que veía Colombia eran novelas rosa, y de humor como el chinche. Así que mis novelas no han contribuido a la violencia. Yo no soy un hampón, yo soy un capitalista, es el resultado de mi trabajo como escritor.

Sigue ahora la suerte máxima de la representación política, en la primera vuelta a la presidencia. Gustavo Petro puede crecer con el voto de los que nunca han votado, los que Gustavo Bolívar ha representado en sus obras con gran éxito.

Él buscará que Uribe Vélez concurra a la JEP, o la justicia ordinaria para que cuente la verdad a los Colombianos, sobre las causas criminales que lo rozan hasta hoy. Recuerda que no lo hace por odio, sino que ni ninguna paz puede prosperar sin verdad, y esta pasión no lo abandona.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario